En el siglo XIX se produjo en Europa un gran interés por Andalucía. Varios compositores sintieron atracción por su pasado andalusí y por lo que les evocaban monumentos como la Mezquita de Córdoba o la Alhambra. Andalucía seducía por su exotismo y por los variados aires musicales propios de nuestra tierra, como la cadencia andaluza o la contagiosa gracia de los ritmos de los fandangos, boleros o seguidillas. El embrujo de la Alhambra La Alhambra se convirtió en el siglo XIX en centro del interés de los viajeros que visitaban Andalucía. A ello contribuyeron escritores como el norteamericano Washington Irving, autor de la obra Cuentos de la Alhambra. El alhambrismo musical fue una especie de moda que buscaba la evocación de lo andaluz a través de este monumento único. Existen numerosas obras inspiradas en la Alhambra como Fantasía morisca: A Granada (Chapí), En la Alhambra (Bretón), Al pie de la reja (Miguel Carreras), Torre bermeja (Albéniz), Recuerdos de la Alhambra (Francisco Tárrega), etc.
Tárrega - Recuerdos de la Alhambra - piano
A Granada. Fantasía Morisca (1882), de Ruperto Chapí
La músicaandalusí, que se considera patrimonio de Andalucía, es la música que se desarrolló en al-Ándalus durante el período de permanencia de los árabes en la Península (desde el siglo VIII hasta finales del siglo XV). Esta música surgió de la fusión de la música árabe de Oriente con la música que existía en la Península Ibérica antes de su llegada. Uno de los precursores de la música andalusí fue Ziryab. A Ziryab se le conocía con el nombre de «pájaro negro» por su piel morena y por su canto dulce y melodioso. Ziryab y la música andalusí Aunque nació en Bagdag (actual Irak) se estableció en Córdoba y allí realizó una gran labor fundando la primera escuela de canto de Occidente y creando una gran cantidad de piezas y de obras teóricas musicales. Ziryab sentó las bases de la música andalusí y desarrolló un nuevo género musical, la nuba. Las nubas son cantos formados por 24 piezas musicales, una para cada hora del día. Podían estar acompañadas por la percusión del tar (pandero) y de la darbuka (tambor alargado en forma de vasija).
En Andalucía las fiestas y las ferias son celebraciones populares muy va- riadas que favorecen las distintas manifestaciones del folclore de nues- tra tierra. No hay una celebración festiva en que la música no esté presente, ya sea cantando, bailando o con la interpretación de instrumentos. El origen de muchas de las fiestas es religioso: la Semana Santa en toda Anda- lucía; el Corpus, en Granada; las Cruces de Mayo de Córdoba, Almería o Grana- da; la Romería del Rocío de Almonte, etc. Pero hay también otras fiestas que se celebran en nuestra comunidad que nosonreligiosas: los Carnavales de Cádiz y de otras ciudades, la Vendimia de Jerez o las fiestas de Moros y Cristianos de Granada. Las ferias surgieron hace varios siglos con la finalidad de comprar o vender productos agrícolas, artesanales y ganado. Actualmente el carácter de estas fiestas es puramente festivo. Hay que destacar por su vistosidad y fama internacional, la Feria de Abril de Sevilla, la Feria de Málaga y la del Caballo en Jerez de la Frontera.
Tangos de Granada - Día de la Cruz
Desfile de moros y cristianos el Día de la Toma de Granada
Sevillanas en la feria de Sevilla. 2019 HD (Lucía y Manuel 11 y 12 años)
La coplaandaluza, también llamada canciónespañola, es una de las formas de expresión más ricas del pueblo andaluz. Ha sido considerado un género popular español cantado frecuentemente por mujeres tonadilleras andaluzas. Los temas de estas canciones conservan rasgos del flamenco y suelen girar en torno al amor. PastoraImperio fue una de las primeras cantantes de copla. Fue una mujer muy admirada y la musa de algunos artistas de la época, como el pintor Julio Romero de Torres. RocíoJurado alternó la copla con baladas románticas que le dieron fama inernacional. También tenía excelentes cualidades para el cante flamenco. CarlosCano, cantautor granadino, es conocido por muchos como «la voz del pueblo andaluz» y recuperó estilos tradicionales andaluces relativamente olvidados como el trovo popular y muy especialmente la copla.